En el centro geográfico del país se ubica Durazno, una ciudad con identidad propia donde reencontrarse con la tradición. Al situarse a igual distancia de ambas fronteras, es una ciudad de intenso tránsito, con la actividad comercial que esto conlleva. En Durazno hay varios atractivos para descubrir: playas fluviales, parques, monumentos históricos y la calidez propia de los pueblos del interior, aunque se trate de una animada ciudad con más de 30 mil habitantes.
Qué ver y qué hacer en Durazno
Plaza Independencia: Es el epicentro histórico y social de la ciudad; en su perímetro están los monumentos más importantes de la historia duraznense. Llama la atención una columna de 14 metros de alto elevada en 1892 para celebrar los 400 años de la llegada de Colón a América. La columna tiene en su cima una esfera donde se guardaron escritos de los pobladores de la época sobre la realidad de la ciudad, que fueron leídos cien años después, en 1992. Ese año se atesoraron nuevos documentos que serán leídos en el 2092.
Parroquia de San Pedro: Es la primera Iglesia de la ciudad, construida a lo largo de varios años desde 1887 (aunque la primera capilla estaba en pie desde principios del siglo XIX). En 1967 un incendio destruyó su interior, que fue recuperado por el ingeniero Eladio Dieste con su característica estructura de ladrillo. La construcción es un emblema de la arquitectura moderna, reconocida a nivel mundial. El contraste con la fachada de estilo clásico la hace más interesante. Está sobre la Plaza Independencia.
Parque de la Hispanidad: Escenario de multitudinarios eventos populares, este parque se ubica en las afueras de la ciudad, en el kilómetro 180 de la Ruta 5. Es una zona ideal para la recreación y el deporte al aire libre; aquí está una de las mejores pistas de motociclismo en el país. Tiene un lindo paisaje de lagos y árboles diversos. En sus instalaciones se realiza el Festival Nacional de Folclore, que convoca miles de visitantes cada febrero.
Playas sobre el Río Yi: Asentada sobre este río, Durazno tiene lindas costas que son muy frecuentadas en verano por los lugareños. Son playas de arena aptas para baño, rodeadas de monte indígena. La playa preferida es “El Sauzal”, situada junto al Camping de los 33. La pesca de tararira es una de las actividades clásicas en el Río Yi. El puente viejo es otra de las postales tradicionales de la ciudad.
Zoo: El paseo perfecto para ir con niños. El zoológico municipal está en la entrada de la ciudad, sobre la ruta 5, y guarda una interesante reserva de fauna autóctona y exótica. A lado está el Parador Municipal, donde se puede tomar un buen almuerzo.
Museo Casa de Rivera: Los interesados en el turismo histórico y cultural deben visitar este museo (sobre la Plaza Independencia, Manuel Oribe 775), construido por Fructuoso Rivera en 1835. Hoy alberga una interesante colección de objetos y documentos que repasan el pasado colonial de Durazno.
Estancia El Paraíso: Histórico casco de estancia situado cerca de la estación de ferrocarril de Molles. Data de 1856, construido por Carlos Genaro Reyles; padre del escritor Carlos Reyles, quien desarrolló allí parte de su obra. En su predio hay varias especies de fauna autóctona y exóticos ejemplares de pavorreales.
Capilla de Farruco: Otro tesoro histórico de Durazno, en pie desde la época colonial. Francisco "Farruco" Rodríguez, hacendado gallego, construyó esta capilla rural en 1797, en su estancia entre los arroyos del Cordobés y de las Cañas. Alrededor de la capilla (que funcionó como fuerte, pulpería y cuartel) hay ruinas de los antiguos ranchos y alambrados de piedra del lugar. Hoy funciona una romería donde se realizan actividades criollas. Está en el kilómetro 261 de la Ruta 6.
Llamadas del Interior: Durazno es famosa por albergar las primeras Llamadas del Interior del país, un evento que atrae multitudes de todo el país. La fiesta se hace todos los febreros desde 1990; en el desfile concursan comparsas de todos los departamentos, que compiten para clasificar a las Llamadas de Montevideo.