Aguas Dulces es un típico pueblito costero de aire agreste y familiar, con pintorescos ranchos de madera frente al Océano Atlántico. Si te preguntas qué hacer en Aguas Dulces, la primera respuesta es clara: descansar. A diferencia de otros balnearios de Rocha, Aguas Dulces se mantiene tranquilo incluso durante el mes de enero. Los disfrutes clásicos: un par de buenos libros, caminatas por la playa, mates al atardecer, buñuelos de algas en alguno de los barcitos de madera por la calle principal, llamada Cachimba y Faroles en honor a los objetos típicos de los orígenes del balneario.
Pero los más inquietos encontrarán unas cuantas actividades y lugares para explorar en Aguas Dulces y sus alrededores. Quienes aprecian lo simple descubrirán varios atractivos turísticos en este sereno destino.
Qué ver y qué hacer en Aguas Dulces
Sol y playa: La playa es el gran atractivo del balneario. Aunque no tiene los privilegios geográficos de algunos balnearios vecinos (es una playa recta, de arena gruesa y agua no tan clara), el paisaje tiene el encanto especial de los ranchos con palafitos sobre las dunas. La bajada a la playa en el centro del balneario es la zona más concurrida, pero hacia el oeste, camino a Valizas, hay grandes extensiones de arena deshabitadas. El atardecer es la hora más linda para hacer playa en Aguas Dulces, ya que es cuando llegan los botes de pesca artesanal, que muchas veces venden sus últimas capturas ahí mismo.
Gastronomía: La calle principal del balneario se ha convertido en una variada plaza de comidas con diferentes opciones para almuerzos y cenas. Restaurantes amplios y barcitos íntimos, todos de estilo sencillo y familiar, sirven delicias de mar, pizzas, chivitos y pastas acompañados de buenos tragos. Doña Tota, sobre la playa, es el local más tradicional del lugar, con pastas caseras son famosas en todo Rocha.
Feria de Artesanos: En el cruce entre Avenida de los Creyentes con Cachimba y Faroles está la colorida feria artesanal del balneario, con sus puestos de madera quinchados que son un paseo típico de la nochecita.
Entretenimiento: Para los más pequeños, hay un local de maquinitas (16 Games) y varios juegos familiares en el Club de Aguas Dulces. En el club se realizan diversas actividades recreativas para todas las edades.
Vida nocturna: La noche en Aguas Dulces no es explosiva como en La Paloma o Punta del Diablo, pero tiene sus lindos lugares para los que rehúsan ir a dormir temprano. Hay barcitos bohemios con buena música para sentarse a picar algo o tomar cerveza hasta altas horas. Terral Bar tiene músicos en vivo y una ambientación que invita a relajarse. La Terraza es el boliche clásico, justo frente al mar, donde se puede ir a bailar todas las noches del verano. El Cuento es otros pub clásico, que atrae a los veraneantes más jóvenes.
Caminata a Valizas: La travesía Aguas Dulces-Valizas por la playa es una caminata tradicional entre los veraneantes. Los más deportistas se pueden anotar en la correcaminata que parte de Barra de Valizas y llega a Aguas Dulces, realizada todos los veranos hace ya 12 años. Los inscriptos en Aguas Dulces son trasladados en camión hasta el punto de largada.
Monte de Ombúes: Los amantes del ecoturismo no pueden perderse la excursión al Monte de Ombúes, que sale a diario desde el Arroyo Valizas (de la Terminal de Aguas Dulces salen varios ómnibus por día hasta Valizas). Este bosque es una de las mayores reservas de ombúes del mundo, un alucinante muestrario de la flora y fauna autóctona.